Haurren Hiria

La ciudad de las niñas y los niños

el reto

 

Recuperar la calle para las personas. Las ciudades y los pueblos (y las escuelas, los centros municipales de ocio y deporte, las casas o los hospitales) se han configurado a partir de parámetros excluyentes y tomando decisiones que no se ajustan a las necesidades de la mayoría. Y así, crecemos en espacios hostiles, difíciles de habitar o explorar y con víncuos débiles que empobrecen nuestra capacidad para afrontar retos o crecer juntas. 

la estrategia

 

Incorporar a las personas niñas en la política local. Aprender a trabajar con «diferentes», restaurar condiciones que favorezcan la autonomía, favorecer la particiación de todas… Tomar a las niñas y los niños como parámetro para la trasnformación de los espacios y las relaciones y sus necesidades como punto de partida para no perder de vista a nadie. Poner en valor y aprovechar su condición disruptiva y vinculante, para que nos ayuden en este aprendizaje.

La calle de los niños y las niñas es una calle para cualquiera

La Ciudad de l@s niñ@s es una propuesta política que nace, de la mano de Francesco Tonucci, en 1991, en Fano (Italia)

Los niños y las niñas

Nuestros entornos y hábitos no cumplen con las leyes que defienden los derechos de las niñas y los niños, y es responsabilidad de las adultas cambiar esto.

Con las personas niñas

porque pueden, es su derecho y lo necesitamos.

Desescolarizar la ciudad

Las ciudades -las calles y relaciones- son espacios excluyentes construidas a partir del parámetro Hombre-Trabajador-ConCoche. Podemos repensar y reconstruirlas desde el parámetro de una persona niña, competente, singular… que juega.

es estúpido e inmoral apartar a las personas menores de 18 años del crecimiento colectivo

¿Cómo?

1. Garantizar la Autonomía de Movimiento

O A la Escuela con Amig@s

una apuesta municipal por repensar el espacio urbano -los caminos de casa al cole- con las niñas y niños. Abordar la seguridad, la libertad, la co-responsabilidad… creando redes de movimiento autónomo por la ciudad.

Jugar la Ciudad y estar presentes

Hay muchas otras formas de abordar la autonomía pero el camino de casa a la escuela es bastante universal y puede ayudar a encarar después otros proyectos: habilitar la calle para el juego, cambiar puertas de acceso a espacios y mobiliario urbano, construir redes de comerciantes que ayuden al miedo adulto…

las niñas no necesitan nada para recorrer su pueblo

solo que las mayores «les dejemos».

no hay una edad adecuada

cada una a nuestro ritmo, personas y proyectos

que se vea (a las niñas y los proyectos)

para que su presencia contagie

Tener alianzas suele ser importante

con la policia municipal, con los comerciantes, las escuelas, las pediatras…

y de vez en cuando,

quitarle el lugar privilegiado al coche, para dárselo al juego.

2. Dar lugar a la diversidad

O un Consejo de Niños y Niñas

un órgano consultor de Alcaldía que ayude a la persona con «máxima responsabilidad» a aprender a trabajar con «otro».Además de ser una experiencia de participación para el grupo de niñas y niños, el consejo es una manera de practicar distintas formas de gestión local.

Ser, cada una como es y juntas

El Consejo permite «acompañar» un cambio de mirada y actitud en las adultas con responsabilidad política y técnica. Es un compromiso de escucha, conversación, decisión, diseño, desarrollo… las formas dependen, como siempre, de cada comunidad. Es fácil abordar, desde esta experiencia, otros proyectos vinculados a la vida comunitaria, su diversidad y su crecimiento colectivo.

un grupo de, por ejemplo, 20 niñas y niños

que pueden tener entre 7 y 9 años de edad. O más pequeñas, o mayores.

unas personas que escuchan y sirven

a la adulta responsable y al grupo de niñas

un encuentro para preguntar

y solo pregunta quien está dispuesta a escuchar

El Consejo da consejo

incorpora miradas, puntos de vista, necesidades, ideas…

3. Servir en la incertidumbre

O la proyección participada

Cambiar la mirada, aprender a escuchar, a decir… y también a hacer juntas. Este proceso permite crecer más allá de un programa previsible. Encararlo es una oportunidad para practicar una actitud de servicio y el entrenamiento de las gentes y la administración en «la gestión de la incertidumbre».

y más allá.

La proyección participada es, otra vez, sólo un ejemplo de lo puede suponer abrir la puerta del gobierno local a las niñas y los niños. Los ámbitos de reflexión, diagnóstico, diseño, decisión, desarrollo… son capas de procesos comunitarios que pueden afrontarse de manera participada y los niños y las niñas, además de ser amables y eficaces aliadas, tienen derecho a tomar parte. Y nosotras la obligación de encarar este aprendizaje.

Es quien recorre quien mejor puede dibujar el mapa

Los «Caminos de autonomía a la escuela» son un comienzo sencillo para iniciar un proceso donde los niños y las niñas sean parte

Recorrer los caminos con ellas

sus ritmos, sus miradas, sus deseos, incomodidades… hacer un diagnóstico con ellas es un paso natural

Redefinir el espacio común con ellas

aprender a ajustar la normativa y el protocolo a las personas pequeñas, incorporarlas al diseño del espacio que van a habitar… parece evidente

Y lo mismo con las propuestas de Consejo

¿Y si quieren hacer un mercado? ¿y si quieren usar un edificio público? ¿y si quieren hacer una campaña de sensibilización?

Con sus ideas locas

a veces tenemos la suerte de que nos obligan a salir de nuestra zona de confort

en el lugar de todas

dar lugar a la diversidad, ofrecer condiciones de autonomía donde cualquiera pueda ser y tomar parte… y crecer, en cualquier proceso comunitario, juntas.

para saber más

La Formación

Solasgune colabora con la Universidad del Pais Vasco en el PostGrado Online sobre el proyecto de La Ciudad de los niños y las niñas y sus implicaciones en el ámbito comunitario.

Transformación comunitaria, urbana, y política a través de la autonomía y la participación infantil. La propuesta internacional “la cittá dei bambini” de Francesco Tonucci y el CNR de Roma.

 

La Red Haurren Hirien Sarea

En el año 2014 firmamos un acuerdo de colaboración con el CNR de Roma para promover el proyecto de La Citta dei Bambini en nuestro entorno. Desde entonces, en colaboración con Innobasque, hacemos las labores de secretaría técnica de la Red Vasca Haurren Hirien Sarea.  Por supuesto, son muchas las experiencias que se están desarrollando más allá de la Red, pero aquí hay una buena muestra!

La Red Internacional

Desde que el proyecto se inició en Fano en el año 91 son muchas las ciudades y pueblos que han asumido la transformación de sus espacios, estilos de relación o modelos de gobierno, y muchas de ellas son parte de esta Red Internacional que se coordina desde el CNR en Roma por el propio Francesco Tonucci, Antonella Prisco, Daniela Renzi, Lorena Morachimo y otras colaboraciones puntuales.